lunes, agosto 02, 2010

ESTGMA. ERVIN GOFFMAN

Estigma. La Identidad Deteriorada

1. Estigma e identidad social
Los griegos crearon el termino para referirse a signos corporales con los q se intentaba exhibir algo malo y poco habitual en el status moral del que los presentaba. Durante el cristianismo se agregaron dos significados metafóricos: como signos corporales de la gracia divina; como signos corporales de perturbación física (en referencia médica indirecta de la alusión religiosa). Actualmente, se usa parecido al original, pero se designa preferentemente al mal en sí mismo y no a sus manifestaciones corporales.

Concepciones preliminares

La sociedad establece los medios para categorizar a las personas y el complemento de atributos corrientes y naturales de cada una de esas categorías. El medio social establece las categorías de personas q en él se pueden encontrar. Así podemos tratar con “otros” previstos sin dedicarles atención especial, pudiendo prever en que categoría están y cuáles son sus atributos personales (honestidad) y estructurales (ocupación).
Estas anticipaciones las transformamos en expectativas normativas, en demandas rigurosamente presentadas, pero sin ser conscientes de formularlas. Por lo tanto se llaman “demandas en esencia”, y el carácter q atribuimos es una “imputación” hecha con una mirada retrospectiva en potencia, una caracterización en esencia, una “identidad social virtual”. La categoría y los atributos q de hecho le pertenecen son su “identidad social real”.
Si la persona q tenemos en frente demuestra ser dueño de un atributo q lo vuelve diferente de los demás (dentro de la categoría de personas a la que él tiene acceso) dejamos de verla como una persona total y corriente para reducirlo a un ser menospreciado. Es un estigma. Produce un descredito amplio (falla, desventaja, defecto). Constituye una discrepancia especial entre ident social virtual y real. Hay otras discrepancias entre estos dos, por ejemplo la q nos mueve a reclasificar mejor.
No todos los atributos indeseables entran acá. Solo los q son incongruentes con nuestro estereotipo acerca de cómo debe ser determinada especie de individuos. “Estigma” se refiere a un atributo profundamente desacreditador. Pero lo q en realidad juega es un lenguaje de relaciones, no de atributos. Un atributo q estigmatiza a uno puede confirmar la normalidad de otro.
Estigma: clase especial de relación entre atributo y estereotipo. Pero existen importantes atributos q son desacreditadores en casi toda la sociedad.
Doble perspectiva del estigma. El individuo estigmatizado supone q su calidad de diferente ya es conocida o evidente en el acto (desacreditado); o ésta no es conocida por los q lo rodean ni inmediatamente perceptible (desacreditable).
Tres tipos de estigmas:
 las abominaciones del cuerpo.
 Los defectos del carácter (falta de voluntad, creencias rígidas, etc. Todos estos se infieren de informes sobre alcoholismo, adicciones, etc.).
 Estigmas tribales. De raza, religión, nación, susceptibles de ser transmitidos por herencia y contaminar a toda la familia.
Los 3 poseen los mismos rasgos sociológicos: un individuo q podía ser aceptado fácilmente en un intercambio social posee un rasgo q se impone a la fuerza a la atención y nos lleva a alejarnos, anulando el llamado de los restantes atributos.
Las personas q no se apartan de las expectativas particulares son “normales”. Y como normales creemos q el q tiene un estigma no es totalmente humano. Así discriminamos, reduciendo en la práctica sus posibilidades de vida. Construimos una teoría del estigma, una ideología para explicar su inferioridad y peligrosidad, racionalizando a veces una aversión basada en otras diferencias, por ej.: clase social. Utilizamos “invalido”, “bastardo”, etc., sin reparar en su significado real. Basándonos en el defecto original, atribuimos muchas imperfecciones, (por ej.: gritarle a los ciegos como si fueran sordos también) y algunos atributos deseables, pero no deseados por la persona en cuestión (por ej.: un sexto sentido).
Ahora bien, los miembros de una categoría social sustentan sólidamente un modelo de opinión q no les es directamente aplicable, según su parecer y el de otros sujetos. La diferencia está en llevar a cabo una norma y simplemente sustentarla. Y el problema del estigma surge donde existe una expectativa de q quienes pertenecen a una categoría dada deben apoyar y llevar a cabo una norma particular.
También es posible q un sujeto no consiga vivir de acuerdo con lo q exigimos de él y a pesar de ello permanezca indiferente a su fracaso, protegido por sus creencias sobre su identidad siente q nosotros no somos del todo humanos. Lleva un estigma, pero no lo impresiona ni lo angustia (por ej.: gitanos).
El estigmatizado sostiene las mismas creencias q nosotros sobre la identidad, esto es fundamental. La sensación de ser “una persona normal”, y merecer una oportunidad justa para iniciarse en alguna actividad, es un profundo sentimiento acerca de su identidad. Sus reclamos no se basan en lo q piensa q se merece todo el mundo, sino solo los que pertenecen su misma categoría. Las pautas q incorporo de la sociedad más amplia, lo habilitan para mantenerse íntimamente alerta frente a lo q los otros consideran como su defecto, esto lo lleva a aceptar q está lejos de ser como en realidad debería. La vergüenza se convierte en una posibilidad central, q se origina cuando percibe uno de sus atributos como una posesión impura de la q fácilmente puede imaginarse exento.
Es probable q la presencia inmediata de los normales refuerce esta disociación entre las autodemandas y el yo. Pero también el sujeto puede llegar a odiarse y denigrarse a sí mismo cuando esta solo frente al espejo.
El rasgo central de la situación del estigmatizado está referido a la aceptación. Las personas no logran brindarle el respeto y la consideración q los aspectos no contaminados de su identidad social habían hecho prever y q él había previsto recibir; se hace eco del rechazo cuando descubre q alguno de sus atributos lo justifica.
Corrección directa: en casos puede corregir el fundamento objetivo de su deficiencia. Por ej.: cirugía plástica. Debe mencionarse la “victimización” resultante del peligro q para el estigmatizado significa caer en manos de charlatanes fraudulentos q le venden medios para devolver juventud, etc. Esto revela los extremos a q están dispuestos a llegar, y por lo tanto lo doloroso de la situación q los conduce a tales extremos.
Corrección indirecta: intenta corregirlo dedicando un enorme esfuerzo personal al manejo de áreas de actividad, q por razones físicas o incidentales, por lo común son inaccesibles para quien posea su defecto. (El lisiado q aprende o re-aprende a nadar)
La no corrección: puede romper con la realidad e intentar emplear una interpretación no convencional acerca del carácter de su identidad social. Es probable q use su estigma para obtener beneficios secundarios como excusa por la falta de éxito q padece a causa de otras razones. Por ej.: la nariz deforme era el gancho del q colgaban las insatisfacciones del paciente. Una vez arreglada con cirugía el paciente perdió la protección emocional, no estaba preparado sin la ayuda de una “desventaja” y pudo recurrir a la protección de las pautas de conducta menos sencillas, propias de la neurastenia, histeria, etc. También puede pensar q las desgracias son una secreta bendición porque “el sufrimiento deja enseñanzas”.
Las reacciones en las personas estigmatizadas y normales consideradas hasta aquí son las q pueden aparecer durante mucho tiempo y cuando no existe entre ellas un contacto corriente. Ahora bien, la previsión de los contactos mixtos (o sea cuando las dos se hallan en una misma “situación social”) puede llevar a normales y estigmatizados a organizar su vida de modo tal de evitarlos. Lo q trae mayores consecuencias para el estigmatizado, porque él es quien debe realizar el mayor esfuerzo de adaptación.
Carente del feed-back del intercambio social cotidiano, el que se aísla se vuelve desconfiado, depresivo, hostil, ansioso y aturdido.
Tener conciencia de la inferioridad significa q no puede dejar de formularse conscientemente cierto sentimiento crónico del peor tipo de inseguridad, y eso trae ansiedad, y algo peor: el temor a q los demás puedan faltarle el respeto por algo q exhibe significa q se sentirá siempre inseguro en su contacto con otra gente; y esta inseguridad proviene de algo q ese individuo sabe q no puede arreglar. Esto representa una deficiencia casi fatal en el sistema del yo, ya q no puede ni ocultar ni excluir esta formulación definida: “soy inferior, entonces la gente me tendrá aversión y yo no me sentiré seguro con ellos”.
En el contacto mixto, en el encuentro frente a frente tiene lugar una de las escenas primordiales de la sociología. Aquí ambas partes deberán enfrentar las causas y los efectos del estigma.
El estigmatizado puede descubrir q se siente inseguro acerca del modo en q lo vamos a identificar y recibir. Hasta q el contacto no se realiza, no pueden estar seguros nunca si la actitud será de rechazo o de aceptación. Viven en una frontera social y psicológica, enfrentando todo el tiempo situaciones nuevas.
De este modo aparece en él la sensación de no saber q es lo q los demás piensan “realmente” de él. Además se puede sentir “en exhibición”, debiendo llevar entonces su autoconciencia y su control sobre la impresión q produce hasta extremos y áreas de conducta q supone q los demás no alcanzan. Puede percibir también q se ha debilitado el habitual esquema q permite interpretar los acontecimientos cotidianos. Siendo sus logros menos importantes considerados como signos de sus admirables y extraordinarias aptitudes. Por ej.: le festejan todo por ser lisiado.
Al mismo tiempo, siente q un desliz sin importancia o un mínimo accidente pueden interpretarse como expresión directa de su estigmatizada calidad de individuo diferente. Por ej.: una chica q patinaba siendo lisiada y se cae por una piedrita en el patín…“se cayó la pobrecita“
Cuando fijamos nuestra atención (por ej.: vista) en el defecto del desacreditado, este puede sentir su intimidad invadida. Esa exposición q siente puede agravarse con las conversaciones q los extraños se sienten autorizados a entablar con él, expresan lo q el juzga una curiosidad morbosa, o una ayuda q no quiere ni necesita. En suma, se infiere q un estigmatizado es una persona a la q los extraños pueden abordar a voluntad con tal de q sean sensibles a situaciones de esta clase.
El individuo estigmatizado puede responder anticipadamente con un retraimiento defensivo (por ej.: cuando salgo bajo la cabeza, me siento inferior); o puede intentar establecer contactos mixtos mediante modos agresivos (esto puede provocar respuestas impertinentes en los demás).
Entonces, los desacreditados, tienen razones especiales para sentir angustiosa una situación social mixta. Pero nosotros también. Porque ya sea demasiado agresivo o demasiado tímido, lo cierto es q es demasiado propenso a leer en nuestras acciones significados q no intentábamos darles. Por nuestra parte sentimos q si damos un interés sensible y directo por su condición nos “extralimitamos”; y q si olvidamos verdaderamente su defecto podemos tener con el “exigencias imposibles” o “despreciar” a sus compañeros de sufrimiento, sin pensarlo.
Sentimos q percibe cada fuente potencial de malestar originada en la interacción, q sabe q nosotros también lo percibimos, e incluso q sabe q sabemos q él lo sabe.
Es probable q intentemos continuar como si en realidad el individuo correspondiera por entero a una de las clases de personas q nos son naturalmente accesibles, o si no funciona, tratarlo como si fuera una “no-persona”, y no existiera como individuo de una atención ritual. Él a su vez, probablemente al principio siga con sus estrategias.
Por consiguiente la atención se aleja en disimuladamente de sus blancos obligatorias, y aparece la conciencia del yo y la conciencia del otro, y sea q se reaccione abiertamente y sin tacto, o q no se la mencione explícitamente, la condición básica de intensificar y acotar la conciencia q de ella se tiene hace q la interacción se articule demasiado exclusivamente en función de ella. Esto va acompañado por los habituales síntomas de la incomodidad y falta de soltura (referencias cautelosas, ligereza artificial, la mirada q se clava en otra parte).
El estigmatizado tiene más oportunidades q nosotros de enfrentarse con estas situaciones, es probable q las maneje mejor.

El igual y el sabio

CuAndo la discrepancia entre ident social virtual y real es conocida o manifiesta, se daña su identidad social. Lo aísla de la sociedad y de sí mismo. Pasa a ser una persona desacreditada frente a un mundo q no lo acepta. Advertirá q existe gente dispuesta a adoptar su punto de vista en el mundo y a compartir con él el sentimiento de q es humano y “esencialmente” normal, a pesar de las apariencias y de sus propias dudas. Se consideran dos categorías:

El igual:
personas q comparten su estigma. Pueden enseñarle las mañas del oficio, ofrecerle apoyo moral, o el placer de ser aceptado como alguien q es igual a los demás. Entre sus iguales puede utilizar su desventaja como base para organizar su vida, pero deberá resignarse a vivir en un mundo incompleto. Por otra pare puede sentir q todo lo q implique centrarse en el “problema” (relatos de sus compañeros, historias de embusteros) es uno de los mayores castigos por tener un estigma.
Los integrantes de una categoría particular de estigma tienden a reunirse en pequeños grupos sociales, ahí se centra su interés, cuyos miembros derivan de la misma categoría; estos grupos están sujetos a organizaciones q los engloban (ex alcohólicos… AA). También cuando un miembro de una categoría entra en contacto con otro, ambos están dispuestos a modificar su trato mutuo por creer q tanto el uno como el otro pertenecen al mismo “grupo”. Se infiere entonces q la palabra “categoría” puede funcionar para favorecer entre sus miembros el establecimiento de relaciones y formaciones grupales, lo q no significa q la totalidad de los miembros sean un grupo. Los miembros de una categoría pueden disponer de una oficina desde la cual promover sus casos al gobierno o prensa, advertir sobre su situación vital. Aquí aparecen los representantes de una categoría. Puede ser un “nativo”, q está realmente al tanto de las cosas, o uno de otro bando. Una labor característica es la de convencer al público para aplicar un rotulo social más flexible a dicha categoría. Otra tarea es aparecer como “oradores” (acá el nativo se ofrece como modelo vivido de una realización normal, demuestra q puede ser buena persona). Ahora bien, cuando se profesionaliza esa representación, al convertir su estigma en una profesión… en primer lugar, los lideres nativos están obligados a tratar con otros líderes de otras categorías, por lo cual se abre su círculo social cerrado, y dejan de ser representativos en términos de participación social; en segundo lugar, pueden introducir ciertas parcialidades sistemáticas en su exposición por estar demasiado implicados en el problema, y ya no prestan atención a su estigma. Sea como fuere aquellos q comparten el estigma del representante se vuelven repentinamente accesibles para los normales q los rodean en forma inmediata.

El sabio:
son personas normales cuya situación especial las lleva a estar íntimamente informadas acerca de la vida secreta de los estigmatizados y a simpatizar con ellos. Gozan, al mismo tiempo, de cierto grado de aceptación y pertenencia al clan. Son los marginales, porque ante ellos, el q tiene un estigma no debe avergonzarse ni ejercer autocontrol, porque sabe q será considerado una persona normal. (Prostituta).
La persona normal q se convertirá en “sabio” deberá pasar por una experiencia personal de arrepentimiento primero, y después se pone a disposición de los estigmatizados, aguardando a q estos legalicen su condición de miembro aceptado. Un tipo de persona sabia es la que cuya sabiduría viene de sus actividades en un establecimiento, que satisface las necesidades de los que tienen estigma como las medidas que la sociedad adopta respecto de estas personas.(enfermera, terapeuta) Otro tipo de persona sabia es la que se relaciona con un individuo estigmatizado a través de una estructura social; esta relación hace que en algunos aspectos, el resto de la sociedad más amplia considere a ambos como una sola persona (ej. padre del invalido) están obligados a compartir parte del descredito de la persona estigmatizada con la cual los une una relación.
En general el estigma tiende a difundirse desde el estigmatizado hacia sus relaciones más cercanas, eso explica el por q estas relaciones tienden a evitarse, o a no perdurar. El sabio suministra un modelo de “normalización”, mostrando hasta donde pueden llegar los normales cuando tratan al estigmatizado como si no lo fuera. Esto es diferente a la “normificacion”, q es el esfuerzo q realiza el individuo estigmatizado para presentarse a sí mismo como una persona corriente. Por otra parte, puede aparecer un “culto al estigmatizado” cuando la respuesta estigmófila del sabio contraataca la respuesta fóbica del normal.
La persona q tiene un estigma aceptado, el sabio, puede colocar al estigmatizado y al normal en una situación incómoda y con excesiva moralidad: al estar siempre dispuestos a cargar un peso q no es “realmente suyo”. Los normales pueden ver esa conducta como agresiva.
También, puede descubrir q debe soportar muchas privaciones típicas del grupo q lo admite y q no puede gozar de la exaltación de sí mismo, q es la defensa común frente a dicho tratamiento. Además, de una manera similar a lo q le ocurre al estigmatizado con respecto a él, le resulta dudoso q su grupo de admisión realmente lo “acepte”.


La carrera moral
Las personas q tienen un estigma tienden a pasar por las mismas experiencias de aprendizaje relativas a su condición y por las mismas modificaciones en la concepción del yo. La sincronización y el interjuego de dos fases iniciales de la carrera moral crean pautas importantes, estableciendo la base del desarrollo posterior.
 1° fase: el estigmatizado aprende a incorporar el punto de vista de los normales, adquiriendo las creencias relativas a la identidad propias del resto de la sociedad mayor, y una idea general de lo q significa poseer un estigma.
 2°fase: aprende que posee un estigma particular (esta vez en detalle) y las consecuencias de poseerlo.
Pautas de socialización…
1. Involucra a los q poseen un estigma innato y son socializados dentro de su desventajosa situación, al mismo tiempo que aprenden e incorporan los estándares ante los q fracasan. Ej. Huérfano.
2. Deriva de la capacidad de una flia y comunidad de constituirse en una capsula de un niño con un estigma congénito. Así lo protegen de info q lo disminuya, y dejan pasar info q llevan al niño a q se vea como un ser corriente de identidad normal. El momento crítico varía según clase, residencia, y estigma, comúnmente es la entrada en la escuela donde aprende de su estigma.
3. Involucran a los q en un momento tardío de su vida son víctimas de un estigma, o advierten q han sido siempre desacreditables (el primero no implica reorganización radical de la visión de su pasado, el segundo si). Son individuos q han realizado un aprendizaje de lo normal y lo estigmatizado mucho antes de tener q considerarse como deficientes. Es probable q tengan problemas con la re-identificación y una facilidad para la autocensura.
4. Está representada por las personas socializadas inicialmente en una comunidad alienada, q deben luego aprender una segunda manera de ser: aquella q quienes las rodean sienten como la única real y valida. Hay q agregar q cuando un sujeto adquiere tardíamente un yo nuevo estigmatizado, las dificultades q experimenta para entablar nuevas relaciones se extienden a sus vínculos anteriores. (los q lo conocían están ligados a una concepción de lo q el fue).

Es probable q en el momento de la 2° fase establezca una nueva relación con los otros estigmatizados.
Cuando comprende por primera vez a quienes debe ahora aceptar como sus iguales, suele sentir una ambivalencia: esos otros no son solo portadores manifiestos de un estigma, distintos, de la persona normal q él cree ser, sino q además pueden tener otros atributos con los q le resulta difícil asociar su caso. Ej.: pretenden q me pase el resto de mi vida con los ciegos haciendo trapos.
Dada la ambivalencia es lógico q aparezcan oscilaciones en el apoyo, en las identificaciones y en la participación q tiene entre sus pares. Sus creencias sobre la naturaleza de su grupo de pertenencia y la naturaleza de los normales sufrirán oscilaciones.
Al revisar su propia carrera moral, el individuo puede escoger y elaborar retrospectivamente las experiencias q le permiten explicar el origen de las creencias y de las practicas q ahora tiene con respecto a sus iguales y a los normales.
Así, al reflexionar sobre el momento en q descubre q los q poseen su estigma son seres humanos como los demás, el estigmatizado puede llegar a tolerar q los amigos q tenía antes del estigma consideren inhumanos a los q para ese entonces él aprendió a ver como personas tan cabales como el mismo.
Otro momento crítico es la experiencia de aislamiento e inhabilitación, q se revela como el momento en q el individuo tenía la posibilidad de pensar en su problema, de aprender acerca de si mismo, de adaptarse a su situación y de llegar a una nueva comprensión de lo q es importante y merece buscarse en la vida.
Hay q agregar q no solo las experiencias personales son las únicas en ser consideradas retrospectivamente como momentos decisivos, sino que también pueden usarse algunas de segunda mano, como la lectura de literatura relacionada con el grupo.

3 comentarios:

Daniel Castillo dijo...

Muchas gracias por su aporte, realmente fue de mucha utilidad

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

muchas gracias! algunas cosas que no me habían quedado claras y aquí las comprendí :)

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...